Sentado en un precipicio...No saber qué hacer, cualquier movimiento puede provocar el salto, o la vuelta a la calma en tierra firme. Miles de ideas, de pensamientos, de sensaciones invaden mi cuerpo, la confusión se ha convertido en el día a día.
¿Cuántas veces te has podido sentir así? ¿Cuántas veces no has podido huir de ti y de tus inseguridades? ¿Cuántas veces te has visto en la cuerda floja?
Comienza la etapa en la que todas las inseguridades han desaparecido, pero ¿cómo empezar esa etapa? Primero, hay que buscar las razones que nos hacen sentir felices, habrá muchas, nadie lo puede negar. Esas razones las debemos aferrar a nuestra vida, sea como sea...También habrá que buscar los apoyos, esas personas que te acompañan en la búsqueda del equilibrio. Y sobretodo, confiar en que lo conseguirás. Así que empieza a sentirte seguro de ti mismo, y siente seguridad cuando estés con los que te rodean, a todos aquellos que quieres, y te quieren.
¡GRITA! ¡AFRONTA LOS MIEDOS! ¡DEMUESTRA QUIÉN ERES, LO QUE ERES, Y LO QUE QUIERES SER! ¡SE TÚ MISMO!
Todas estas frases debes clavarlas en tu mente, y levantarte cada día con positividad...Antes de volver a verte sentado en el precipicio, sin saber a donde ir, sin saber que decisión tomar, lucha por lo que quieres, ¡LUCHA POR TI!
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