Ese momento decisivo

Quien lea esto seguramente se asombre de como se puede empezar una entrada hablando de algo, y acabar hablando de otra cosa, interesante ¿eh?


Y ahí te encuentras, en un momento decisivo, un momento en el que debes tomar una decisión que repercutirá en tu vida para siempre. Lo piensas mil veces, no sabes que hacer, entonces te das cuenta de que esa situación ya tenía decidido todo de antes. ¿El destino o simple casualidad? ''Las casualidades no existen'' decía un amigo... ''El destino no nos llevo hacia ninguna dirección, nosotros somos nuestro propio destino'' decía también... Entonces, ¿que se podía hacer ante una dura decisión, ante un momento que ni el más fuerte podría afrontar? ¿Cerrar los ojos, seguir hacia delante, llevando siempre contigo una mochila que repercutirá en tu vida para siempre?  No, tranquilos, no estoy mal, estoy feliz, hay que intentar tomarse la vida desde otro punto de vista, disfrutarla a pesar de todo, a pesar de TODO...¿Lo entendéis bien, no? Pues eso, los problemas aparecen en nuestro día a día, mayores o menores, ahí están, solventarlos formará parte de nuestra experiencia. Entonces, tal vez os preguntéis por qué escribo esta entrada. Es por una amiga, quiero que sepa, que aquí estoy para todo lo que necesite, aunque va para ella, seguro que todos os sentiréis reconfortados al saber que alguien está ahí siempre, pase lo que pase, ¿no? Aunque creo que debería de borrar el siempre, creer en que algo es para toda la vida solo provocará que nos hundamos en la miseria, cuando descubramos que todo tiene una maldita fecha de caducidad, todo tiene un fin, a veces son finales alegres, otras son finales en los que sufriremos, y así es la vida...Y se supone que esta entrada empezó hablando de momentos decisivos, ella se encuentra en uno, solo debemos seguir hacia delante, afrontar el hecho, no cerrar los ojos, simplemente ser fuertes, sacar fuerza de donde no haya, porque tenemos grandes y grandes reservas en nuestro interior...¿Quién no pasa por malos momentos en su vida? ¿Quién? Los amigos y la familia están ahí para servir de puntos de apoyo para seguir caminando sin caernos. Solo me queda decir, que creo que todo pasa por una razón, y esa razón nunca la sabremos, pero siempre encontraremos un camino mejor, más adornado, con más alegrías que nos esperan...No nos quedemos plantados en mitad de la nada, tendemos a hacerlo cuando tenemos un problema...Pero no, esta vez no...Esta vez debes seguir para delante por todas las personas que te quieren.